viernes, 11 de diciembre de 2015

23 De Villafranca del Bierzo a Trabadelo

Dia 24 de Abril


En Villafranca del Bierzo tenemos la posibilidad de tomar la variante de Pradela (o variante por montaña), no contaba con ella, pero al preguntar en el albergue si hay un camino que no vaya por la carretera, me han recomendado este.

Esta variante fue “inventada” (dicen que por Jato, el hospitalero del albergue Ave Fenix) en los años 80, cuando el camino histórico iba forzosamente por el arcén de la nacional, sin muro de protección y junto a un intenso tráfico. No es difícil imaginar el suplicio para los caminantes, además del peligro de atropello.

Gráfica de desnivel de Etapa 25: Cacabelos - Vega de Valcarce
El camino arranca en fuerte subida por la calle Pradela, justo pasado el puente sobre el río Burbía. Está señalizado con un panel vertical, que lo bautiza, exageradamente, como “camino difícil”. En ese punto coincido con un grupito de peregrinos que empiezan a la vez que yo, y el cartel les debe de asustar un poco y se van por el camino oficial. 

La subida es fuerte sobre todo a lo largo del primer kilómetro, menos mal que es al principio de la mañana, enseguida tenemos unas vistas espectaculares, donde podemos apreciar lo que hemos subido en un momento,


Hasta la Lisa, parece asombrarse y disfrutarlas


El camino está precioso, otra vez entre brezo, castaños y robles.La soledad y el silencio es total, la civilización queda abajo. 



Luego sigue subiendo y subiendo, ahora con más suavidad, está muy poco señalizado, y hay momentos en los que dudo, pero no parece tener pérdida, aunque hasta por aquí arriba llegan "los simpáticos" que nos borran las indicaciones

Se supone que tenemos que seguir recto!
En teoría, no tenía que haber llegado hasta este pueblo, a Pradela, pues por lo visto había una señal que se me ha pasado, que desviaba hacia Trabadelo,


Así que le pregunto al único paisano que consigo ver y me indica cómo coger el camino que baja, pero yo hoy debo estar torpe y tampoco lo veo, así que continúo una carretera recién asfaltada, que ahora baja y baja y que se me hace interminable, hasta que por fin arribamos a un pueblo que me imagino es Trabadelo, donde reencontramos el camino histórico.


Debemos de haber hecho unos 13 o 14 km, sólo, y hemos tardado unas tres horas, es pronto y me veo bien, además este pueblo tiene poca cosa, dudo en continuar hasta las Herrerías, pero está a punto de llover y decido por fin descansar.
Busco el albergue La Crispeta donde me han confirmado que me dejan con la Lisa y me ofrece una habitación con baño en una casa rural que tienen enfrente, 22€ con baño, está bastante bien y nos servirá para descansar.
Al ir a entrar, resulta que la Lisa no quiere entrar de ninguna manera, y es que hay un rio y está como loca por ir a la orilla, así que tenemos que ir al río!!! y que se meta!! total está lloviendo!!


pero en la orilla debe de haber ortigas,  porque de repente empieza a cojear!! y no lleva nada clavado en las patas. Ya entro se las lavo bien y le doy cremita, se le han puesto muy rojas. Madre mía que quehacer me da esta perra!!! Si no fuera tan bonita!!!!


Me como un menú contundente, Me he pedido un caldo gallego y me saca la olla Hummmm!!! delicioso, con sus verduritas y sus garbanzos y su jamón, y una carne mechada, tambien bueníisima!


Albergue la Crispeta, 22€ habitación con baño y desayuno



Leyenda

Según cuenta la leyenda en los alrededores de Pradela se puede escuchar el sonido de una gaita tañida por un inconfundible hechicero que habita en la zona. Se le puede reconocer fácilmente ya que es tan alto como el árbol más alto, sus ropas son de corteza de árbol, su barba es de musgo, su pelo de frondosa y verde vegetación y siempre le acompaña su inseparable gaita con la que entona suaves melodías que hacen crecer la hierba y los árboles. Se dice que los días de tormenta y fuerte viento es el hechicero que muestra su enojo haciendo sonar con fuerza su gaita mostrándonos su descontento con el trato que damos a la tierra donde vivimos.






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